20 de noviembre de 2013

20 de noviembre de 2013 - Sin comentarios

De todo un poco.



Lo primero de todo es pedir disculpas por lo abandonados que os tengo, pero es que aquí arriba la cosa está que arde, ya que también hemos tenido huelga de limpieza como en Madrid, y por lo tanto como hemos estado de servicios mínimos no he podido escribir. Pero como de lo malo siempre hay que sacar lo bueno, pues os cuento…
Bueno, antes poneros en antecedentes, ya que desde hace casi tres semanas no he dado señales de vida, en ese tiempo dos tertulias y la Fiesta de Navidad han acontecido en la República, de lo que a continuación os daré de talles.
Pero como digo… de lo malo, lo bueno. Y es que estando con mi colega Rockberto de recogida de servicios mínimos hemos encontrado unas fotos que nos hicieron recordar (sobre todo a mí).
Trabajo me costó reconocer a los personajes que se escondían tras los personajes (valga la redundancia) de dibujos animados. Y es que en el contenedor de la puerta de entrada a la sala de experiencias paranormales que tenemos en el limbo, aparecieron;  Don Quijote y Dulcinea, BlancaNieves y la Bruja Malvada, Popeye, Axteris, Pocahontas, Bola de Dragón, Heidi, Bety y Bilma y Pedro Picapiedra por partida doble, y también la Ratita Presumida. Luego y tras afinar mucho (y con una ayudita de mi amigo Mustafá) pudimos adivinar de que el recinto no era otro que Villa Locura, y claro con tanto juntar datos, caímos en la cuenta de que se trataba de la fiesta de verano de los bracaneros, que este año fue dedicada a personajes de dibujitos animados.
En fin otra excusa muy imaginativa esta vez, para pegársela.

Fiesta de Verano
 Pero a lo que vamos, hace un par de jueves y coincidiendo con el primero de Noviembre  los bracaneros celebraron la tertulia 189, solitos, para hablar de sus cosas, hacer sus cuentas y meterse entre pecho y espalda un lomo a la sal con salsa que estaba de muerte. En esta ocasión la gentileza llegó de mi amo que tomó las riendas de los fogones. Mientras que el vino que regó la noche llegó de manos del presidente con su Fino El Maestro y de unos litrillos que quedaban sueltos de La Fundi. Todo salió a pedir de boca, con la excepción de que las fotos que daban constancia de tal evento desaparecieron días después debido a un error informático. El Aijao hizo de pinche y “la marina” que está a punto de alumbrar a un nuevo bracanero aportó unas gachas maravillosas.
Y así llegamos al jueves pasado, segundo del mes, y esta vez con invitados y embajadores, llegados desde las vecinas localidades de Montilla, “el francis perez mesa” y su suegro “El camará”. Y por otro lado y desde la vecina localidad de Fernan Nuñez, “el paquito” y “el Richard”.
Embajadores

Cuatro personajes ilustres que no serán fáciles de olvidar en Brácana. El cuarteto mezclaba sabiduría en vinos, en futbol, en viajes al más allá, es decir a ese mundo de juventud de compadres, de andanzas al calor de las faldas de chicas guapas, y por que nó decirlo, a la bendita desvergüenza con gusto que hace que a cada paso que se da, la ilusión por conocer algo nuevo vaya en aumento. Ilusiones de negocios relacionados con el vino, escapadas por las tierras escocesas al amparo de faldas de cuadros, y por supuesto a vivir en Bracana una noche inolvidable para ellos y por descontado para sus anfitriones, los bracaneros.


Foto de Grupo
 
Alguno que otro llegó cenado, pero no pudieron resistirse al jamón y el aceite, ni a las costillas que preparó el Ministro de Alimentación, ni al Fino Los Piratas llegado desde Fernan Nuñez, ni tampoco a los juramentos, ni tampoco a  firmar en el libro de visitas, ni a reírse al calor de una tertulia que iba y venía del vino al aceite, del aceite al vino.

Y sin tregua apenas y tras poner fin a la tertulia 190, los bracaneros esta vez al completo y acompañados por sus respectivas, celebraban en la noche del sábado 16 de Noviembre la tradicional cena de navidad.! A estos no les coge el toro!. Y con tal motivo se desplazaron hasta unos de los restaurantes de más categoría de todo el entorno de Bracana y sus alrededores. El Bar Hisa, donde disfrutaron de una cenita en la que no faltó casi de nada, o mejor dicho de nada. “El Juani”, “el manolo”, “el paquito”, “su sobrino” y el patriarca de todos. EL PACO, mostrando su enorme profesionalidad con una naturalidad que sobrepasa la perfección no dejaron de arrimar vianda y buenos caldos al clan bracanero que con el estomago lleno, tuvieron a bién reclamar la presencia del rey de los fogones de esa santa casa. “El manolo Martinez” que no tendrá (de momento) estrella Michelin, pero que como reciente premiado del Premio Gastronómico Bracanero, guarda con esmero el “Cucharon de palo” que distingue a los mejores magos culinarios. Y claro, aunque se hizo un poco de rogar, “el manolo martinez” salió a saludar a sus devotos con los que accedió a realizarse unas placas (fotos de recuerdo).






Bracaneros  y Bracaneras posando con el Maestro Cocinero
Luego y como para la fiesta siempre están dispuestos, terminaron la velada en la sede Institucional hasta altas horas de la noche a ritmo de digestivos, buena música y algún platico de jamón para “falagar” la cosa.

Nota, aquí lleváis cuatro golpes en uno, a cual mejor, y por supuesto y antes de finalizar un sincero saludo a la Familia del Hisa, sobre todo en estos momentos tan complicados que les está tocando vivir.

Larga vida Bracana.

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